Es evidente y todos tenemos claro que lo importante es que el alumnado, independientemente de su punto de partida, aprenda y avance, por lo que es necesario adaptar el currículo y los procesos de enseñanza – aprendizaje. Sin embargo la inclusividad no es fácil, requiere de un aprendizaje y preparación por parte del profesorado. Existen también otros factores que intervienen, como la ratio, los recursos, etc., pero lo importante es que el profesorado tenga adquiridas las competencias metodológicas necesarias para afrontar esta inclusión.
Pero en las enseñanzas conducentes a una titulación podemos encontrarnos situaciones en las que el alumno aprende, avanza, pero no llega a los niveles exigidos por el currículo para alcanzar la titulación, ¿Cómo adaptamos el currículo o salvamos el problema de la titulación? Ya que de lo contrario el alumnado se podría desmotivar y frustrar.